SOLO LA VIDA

Algo que no trasciende se acaudala,
se acumula día a día por la tierra,
la que abriendo sus entrañas, presurosa y
sedienta de copular con las palabras,
todo lo digiere... todo lo paladea,
misterio o magia.
Capacidad o mística. Embrión
imprescindible de su cuerpo que
se envuelve consecuentemente
incidiendo en los sentidos.
Corazón... corazón... de que te quejas,
porque palpitas desbocado, si no hay tinieblas.
Solo la magia de unos ojos... de una boca
cargada de labios, de saliva triturada
la que se desliza al encuentro de su manto
el que cubre su cuerpo. El que tanto sueña.
Sueños... sueños, los que salpican su almohada
los que rugen dentro de su pecho.
Disponibilidad y fortuna. Amor y vida.
Renovación o muerte...
Solo la vida...
Solo para quererte amor. Eternamente…
 

Molina Medina  

3 comentarios:

  1. Qué bella es la imagen y tu poema, amigo Antonio, tus versos transmiten amor y vida... mucha.

    Un beso.

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  2. Antonio, un bello poema palpitante de amor. Me gusta cómo expresas "los sueños que rugen dentro del pecho".

    Mi felicitación. Me gustará seguirte.

    Un abrazo.

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    Respuestas
    1. Tu lo has dicho: sueños que rugen dentro de nuestro pecho: que incansable como sable cercena lo malo de nuestra mente y deja fluir lo que merece la pena dejar crecer: todo lo que fluye de nuestro cuerpo y el entendimiento hace suyo para los tiempos postreros.

      un saludo
      Y se filtro entre las nubes
      sorbiendo surcos de lágrimas
      que, incansables se mecían
      en las pestañas, de los ojos de su cara.
      Arrastrando las palabras que...,
      generosas, brotaban del corazón
      que brincaba entre las brazas.
      Molina

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