¿¿¿PARA QUÉ NOS DAN LA VIDA???

 

Playa de Getares Algeciras-Andalucía


¿¿¿PARA QUÉ NOS DAN LA VIDA???

Aunque su mente languidezca, su alma ensartada en brotes de azucenas, siempre florece y, con el paso del tiempo, vuelve de nuevo la vida a su conciencia que no fue desterrada si no retenida de su propio hábitat.

 

Parque de los Alcornocales-El Cobre-Andalucía

Las miserias humanas sólo las practican los dioses sin dioses, y el odio que provocan se hace metáfora que sigue en sus corazones que inhalan seísmos de muerte de dulce dolor y fuego en sus almas…

 

La luz explosiona, imperativa, en el corazón de los seres humanos y poco importan las vidas humanas, las de niños, mujeres, ancianos, masacrados por las leyes dirigidas por los gatillos del odio y los sentimientos que matan.

 

Parque de los Alcornocales-El Cobre-Andalucía

Mientras Él (Walt Whitman) nos hablaba con voz estentórea, soñadora: “Que nada exterior llegue a mandar en mí”.

 

Orduña-Bizkaia-Pais Basco.

Padre, no me hables más de dioses ni de gentes que matan,
a los que las conciencias no les sirven ni para poder caminar por las amapolas ni entre rosas rojas, ya que el verde - verde de las praderas está envuelto

 

en la roja sangre de los cuerpos ya mutilados y olvidados donde el alma fue desterrada por los clarines de la intolerancia dejando las raíces de los árboles cubiertos de sangre… ¡de sangre humana!

31.12.23 

Antonio Molina Medina

RINCONES. Asociación Cultural Al-Ándalus BURGOS

 

Rincones- Andaluces en Burgos

“Nosotros no queremos participar en el gobierno ni en la administración pública con los judas que nos venden, ni con los traidores que en la tremenda lucha de intereses sirvan clandestinamente al imperialismo, a los monopolios, a esa política económica que ha permitido que las contribuciones sean quitadas de los hombros de los ricos para ser impuestas sobre los hombros de los pobres.”

Pablo Neruda. 

 

Rincones- Andaluces en Burgos

Dedicada a Al-Ándalus en Burgos

Publicado el 29 de febrero del año 2008 en la revista:

RINCONES. Asociación Cultural Al-Ándalus BURGOS

En un fastuoso teatro

Pegadito a su río

Brotó en Burgos el poderío

De la eterna Andalucía.

 

Sí, chiquillo, surgió del río.

Entre el espesor de la bruma

Manó de sus aguas puras

El cantar de los cantares.

 

Se introdujo por su puerta

Como gotas de rocío

Que impregnaban las paredes,

Los asientos, se sentía su escalofrío.

 

Algeciras- Andalucía

Un fontanero atrevido se coló

A reparar una avería

Por un aviso recibido.

 

No salía de su asombro

Cuando subió al escenario.

Al no encontrar la avería

Se enamoró de la gente

Y se atrevió a compartir

El evento que surgía.

 

Los Barrios- Andalucía

Ocupando su papel de

Presentador aguerrido,

Nos deleitó con su arte

Envuelto en su mono fino.

 

Del escenario brotaban melodías y ‘jipios’,

La madera de su patio crujía con los tacones,

Vibraba con poderío cuando Leli y José

Taconeaban poniendo los cinco sentidos.

 

Sus hechuras y su brisa nos inundaban por dentro,

Los colores de su enagua maceraban en el tiempo

Mientras Nacho, su guitarra y su voz se mezclaba

Con la brisa de otra garganta, la de María.

Y pablo introducía en nuestro interior

Las palmas y la percusión.

 

El Cobre- Algeciras- Andalucía

Noche gitana. Noche con duende. Noche andaluza

La que se siente. Brisa celeste inunda la noche,

Almas dolientes que en el escenario se presienten,

Acompañadas por las musas y duendes en su caminar

 

Que grande la moza. Que fuerza el zagal,

Su brío sobresale de cuerpos danzando.

Vibran los corazones. Salpican lágrimas.

Espuma briosa emerge de sus cuerpos,

De voces con duende y dedos de huesos.

 

La Alhambra de Granada- Andalucía

En burgos, en su Teatro Real,

Brotó pura mirra, la sal de la tierra,

Limpias esporas de vida nueva

Que pululaban por la sala.

Diluyéndose en los corazones

Que la supieron atrapar.

Antonio Molina Medina

25.02.24


Un anciano, el joven, el niño y el poeta.

 

Majaralto- El Cobre- Algeciras

“La educación es el pilar en el que se basa una vida productiva, es la herramienta principal que más utilizamos”

Gabriela Mistral

 

Un anciano, el joven, el niño y el poeta.

“¡Ah! La poesía es a la vida lo que las luces y la música son al escenario… Despójese a una de falsos oropeles, y a la otra de sus ilusiones, y ¿Cuánta realidad queda en ninguna de ellas que invite a vivir o a aplaudir?”

Majaralto- El Cobre- Algeciras- Andalucía

 

Viajaba su mente. La que su cuerpo arrastraba tras los pasos de las golondrinas que siempre vuelan donde sus antepasados les dejaron los nidos hechos, y año tras año, siempre volvían a él.

Los seres humanos solemos volver a esos lugares donde fuimos felices… aunque la pobreza y la hambruna las compartiéramos con sus creadores.

Él sigue retornando a pesar de la losa que cada año pesa sobre su sombra ya consumida por los años transcurridos en su figura.

 

Majaralto- El Cobre- Algeciras

Tarde calurosa al borde de la playa de Getares, mientras los barcos anclados en su bahía esperan su turno para penetrar en el laberinto del puerto con sus mercancías; otros entran y salen cargados de pasajeros a los puertos de otros países y ciudades portuarias, dejando huellas entre dos aguas, mecidos por las suaves olas que rompen su mole de acero y que se abren camino entre surcos a la alta mar.

 

Sentados en la mesa de una cafetería, un abuelo, un joven y un niño menudo de edad. Se observa en nuestra apacible conversación sobre el mundo donde viven y con entusiasmo, los hechos que acontecen en sus vidas. La tarde se alarga, ya que el anciano espera con ansia que sus años de niño se vuelvan a encontrar con los del zagalillo que nos escucha entre miradas que escribe en su mente; mientras el abuelo lo observa, se introduce en su mente porque la historia se repite en sus pensamientos, aun no olvidadizos, de haber hecho lo mismo a su edad.

 

Majaralto- El Cobre- Algeciras

-Se despiden de la cafetería Ela2, ya que la meta del día es acudir al terreno de donde lo arrancaron sin dejarle mirar para atrás con esa misma edad, en la salvedad del instante expuesto.

Caminan hacia los caballos que, hoy son de hierro y acero. Antes, un solo caballo nos llevaba a dicho lugar lejos del mundanal ruido y cercano a las estrellas; en la falda de la sierra, en un –Majal- donde aún sigue instalado el paraíso que él tuvo que abandonar a su corta edad. Y se fundió con el bosque que le atrapaba,  mientras el silencio del paisaje le generaba el de una biblioteca de su ciudad; y transitó por los lugares con la felicidad a cuestas, aferrado a la mano de su madre, y protegido por su padre que volvían de nuevo con sus seis años, los mismos que el zagalillo que le miraba y seguía sus pasos con esa curiosidad que le infundía mi figura, sintiendo la sensación de que la felicidad se colaba en mis sentidos a través del aura, que respiraba como cuando fue niño.  Una esperanza que daba a mi inquietud por poder saborear estos momentos que me ofrecían dentro de la casa de los sueños, de donde salía la creación de momentos sublimes para esparcirlos al mundo, envueltos en la suave brisa de los vientos incluso los chaparros se desnudaban ofreciéndole su capa de corcho a la sazón, gabán de invierno.

 

Majaralto- El Cobre- Algeciras

Una descarga de espasmos sacudía desde su corazón ya que él nos pertenece. Y solamente desde la brisa que enmudece sus ojos entre el desierto por el que camina escucha sediento de vida los cánticos de su corazón los que como la lava de un volcán se desliza hasta apropiarse de sus sentidos, los que en su cuerpo resistía y, sensibleros, volaban como alas de mariposa entre las golondrinas incluso ya, sin el cerebro el que se quedó aparcado a la entrada del Majal, antiguo cortijo que aún recordaba sus primeros andares plagados de soledad, del que aún quedaban sus cimientos y el Toril donde se les ponía el hierro en sus lomos, marca con el acero candente cuyas bestias rugían  de dolor a los confines de las tinieblas delante de los dueños de las reses antes de soltarlas por la sierra.

Majaralto- El Cobre- Algeciras

Mientras solo quedaban las sombras de los árboles frutales. Sus sombras... las que me acogieron mientras escarbaba en sus troncos, recogiendo de sus heridas la pasta pegajosa para hacer la cola, el pegamento. La tierra sonreía a mis pasos dejando la huella y buscando la suya en años de ensueños y eficaces ambientes donde su mente eran sueños, solo sueños entre sonidos que briosos manaban sin degustar de sus menudos años de existencia.

 

La tierra chorrea su agua por el fondo de la sierra mientras observo la figura de d. Miguel el cabrero y curandero, bajando por la ladera de la sierra con sus cabras, dirigiéndose a los rediles para su descanso. Y los pájaros, poco a poco, se van acomodando en los chaparros que rodean la finca dentro y fuera del Majal, y las golondrinas se ocultan en la espesura. Han dejado de volar, quizás en su vuelta... Ya ni el nido, que conservamos año tras año, lograron hallar y pusieron entre los chaparros otro para subsistir y tener sus crías. Mientras, por el exterior de las paredes de piedra, las ovejas silenciosas buscaban su acomodo para pasar la noche entre el arbolado que nos rodeaba, unos bien formados con su capa de corcho reluciente en su exquisita estructura y otros comenzando a elevarse después de sus años de siembra.

 

Majaralto El Cobre- Algeciras

Como bien decía Neruda: “Como lava o tinieblas, como temblor bestial, como campanada sin rumbo, la poesía mete las manos en el miedo, en las angustias, en las enfermedades del corazón.”

 

Una vez más, otra golondrina volvía a su nido; él con sus seis años que lo encharca todo en su entorno, donde hasta el aire se hacía más respirable y más suave, mientras el ahogo en su respirar se hace invisible por las troneras o respiraderos de los hornos de picón que su padre y sus tíos realizaban en la sierra.

 

Otra vez, su cuerpo se posaba entre caballos de acero dejó tras él su vida inicial; sus años de gloria y su perro León, el que aullaba y lloraba de dolor ya que la despedida fue para la eternidad; aunque fue para descubrir caminos nuevos, veredas anchas y estrechas, las que le incitaron junto al verde verde del paisaje cuya vegetación no se extinguió ni en el verano; y le adaptaron a no relegar sus principios. Y aquellos caminos y senderos en los que no había libertad, hasta descubrir en un armario viejo y lleno del polvo unos bultos cubiertos de polvo que se acumuló por años, que él removió y se encontró con las letras y los números que le dieron la verdadera liberación. 

 

Majaralto- El Cobre- Algeciras

A golpe de palabras, las que se transmiten a través del Majal, retrocedió su alma dejando el desnudo cuerpo de un niño, lavando su cuerpo su madre, en la inmensidad del océano.

La fortuna estuvo con él en sus primeros años donde, desde la oquedad de los montes, arboleda en su ladera, divisaba los trenes que circulaban, y entraban y salían de la ciudad y que los llevaría a otra ciudad: Orduña.... donde siguió cultivando la tierra; cambiando el hocino por la ‘guadaña’ y los caballos por los bueyes; en un caserío entre sus fincas donde sus huellas hollara-ron veredas nuevas y campos verdes en la primavera y libros repletos de letras y de imágenes para él desconocidas, y letras para formar palabras y senderos limpios de odio innecesario que el ser humano ejercía detrás nuestro, en nuestra huida de la miseria.

 

Majaralto- El Cobre- Algeciras

“Sola estoy en mi vivir, en mi sentir, en mi pesar. Sé que no voy acorde con nadie y, en el fondo, es lo natural y lo comprendo. Yo no puedo vivir sólo lo actual, mi vida es inseparable del pasado.

(Isabel García Lorca)

Antonio Molina Medina

17.08.23

GRITO A LA TIRANÍA

 

Gaucin- Serranía de Ronda- Málaga- Andalucía

“Los traficantes políticos recurren únicamente a las debilidades de los votantes, nunca a su fuerza potencia. No intentan educar a las masas y capacitarlas para que se gobiernen a sí mismas; se contentan con manipularlas y explotarlas. Para este fin, se movilizan y ponen en acción todos los recursos de la psicología y las ciencias sociales.”

Aldous Huxley.

 

Gaucin- Serranía de Ronda- Málaga- Andalucía

GRITO A LA TIRANÍA

I

Quizá sean los años en los que empiece a preguntarme:

¡Si los pobres no tenemos un lugar para nosotros en la tierra ¿Cómo podemos tener un lugar en el cielo?! Pregunta quizás absurda para los que la descortesía es la única verdad e, inconscientemente, su único futuro. Pero ante la marcha asustadiza de una sociedad que ha apostado por la mentira como única forma de vida… La mentira, la mentira, ¡la mentira! La que todo el mundo se arrodilla ante ella y la hace suya, cual plebiscito imperativo, provocando la muerte, y la esclavitud y sus guerras con la aprobación de sus dioses y el desprecio a los pobres de la tierra… Tal despropósito nos hace pensar que no acudiremos a ese cielo en el que ellos nos incitan a creer, ya que la soberbia con la que nos tratan sería incrédula convivir toda una vida, en infinita amargura, con aquellos que hoy nos humillan con sus riquezas ya que ¡ni la sangre, hoy, respetan! y menos las creencias ni la libertad.

 

Gaucin- Serranía de Ronda- Málaga- Andalucía

Hoy los campos están poblados de cadáveres: los de ayer y los de hoy. Y los mares... ¡hasta los peces los rechazan! Mientras, la miseria inunda el planeta, y el hambre y sus guerras muerden cuerpos y mentes desterradas del planeta; mientras a la derecha del padre estarán algunas almas y a la izquierda la prole saciada de miseria.

 

La sopa de ajo vuelve a calentar nuestro cuerpo. A los estómagos en silencio, que crujen por las veredas; calentar los cerebros, fruto de una auténtica pobreza. La que han dejado mentes de especímenes sin conciencia que hoy pueblan la tierra, ya que los que están a la derecha del padre fueron los que nos enseñaron como crucificaron al profeta. Y siguen crucificando a nuestros hermanos; incluso, el profeta que ellos veneran, cuando le iban a lancear a su costado pidió que su túnica se la quitasen para que la aprovecharse algún ser humano de la tierra.

 

Gaucin- Seranía de Ronda- Málaga- Andalucía

II

 

Un grito de agonía resuena por Andalucía, ya que su respiración se increpa ante la nueva clase que nos domina. Federico nos recibe de nuevo en las noches de luna llena y se le vuelve a oír en su grito de agonía ¡agonía! Retumban los cascos de su corcel por toda la serranía en su nuevo aparecer con la soledad a cuestas por la vega de Granada acompañado de sus fantasmas que aún nos atormentan noche y día.

Las montañas 'incordian' hasta su sombra a aquellos que lo siguen detrás de su muerte, para volverlo a asesinar por gentes innobles. 


Gaucin- Serranía de Ronda- Málaga- Andalucía

Mientras, el vuelo de una golondrina se detuvo nada más verlo; iba con su rostro cubierto de paz y de sueños. Él amó mucho, cabal y tierno, su premio fue sufrir mucho que… hasta su muerte, se apagaron los faroles y las ranas enturbiaban las cloacas de su libertad.

Hoy los crujientes pesebres de frondosas ideas lo recuerdan algunos para desmontar sus palabras otros seguimos sembrando palabras sin cautela al final del camino, mientras el pueblo bosteza de un sueño que olvidaron… Mientras las golondrinas volverán a sus nidos entre oraciones perdidas tras su nacimiento.

Gaucin- Serranía de Ronda- Málaga- Andalucía

Los papeles de la historia, los quisieron ocultar, para que el sueño profundo que nos dio esa fuente de saber; esa llama con su sombra sin venganza, solo amor y esperanza nos volcó junto a su viento. Nos atraparon sus palabras, versos de ayer y de hoy, y del mañana recordándonos de nuevo a ese pueblo amordazado que se vuelve a humillar, aunque su apuesta sea la de su sangre y su soledad, en una mesa, y una silla o asiento de corcho, viendo como la historia se repite y la maldad y la mentira se unen entre descarnadas palabras, mientras su muerte se extiende de nuevo entre la maldad de un pueblo que perdió su libertad.

Quizás no esté todo perdido ya que “Él que se acerca a la verdad y a la leyenda del maestro siente su mirada inquietante y nos arrojamos a su mar”.

03.08.23

Antonio Molina Medina

ME SIENTO…

 

Gaucín- Serranía de Ronda- Andalucía

Mi intención es despojar a la poesía de todo lo objetivo y decir lo que tengo que decir en la forma más sería posible.

Pablo Neruda.

 

Gaucín- Serranía de Ronda- Andalucía


ME SIENTO…

Buenos días, amigo. Hoy me siento descompuesto, y tan solo con ideas alimentadas por la nada, ya que la muerte es el pesebre de los mal nacidos y, sin agua que beber (ya que el cielo se ha oscurecido) porque no quiere ni ver al ser más despreciable que domina lo infinito, y sin peces en los ríos, pues las aguas de los mares han cambiado de color degradando su paisaje el que, incoloro, se llena de sangre y de odio, y de acerbo y clorados instintos, dominados por la muerte, insaculada ya por el planeta, donde los seres, ya descubiertos, son peores que los animales, ya que tratan de destruir su propio planeta.

Gaucín- Seranía de Ronda- Andalucía



Y sigue la masacre entre los mortales, dejando los campos y arbolados repletos de seres cuyos huesos quedarán en el olvido, como lo fueron en nuestra generación anterior, los que hoy sonríen y nos miran dentro de su aire que remueve nuestras conciencias a pesar de tanto desastre ya que los niños no quieren que sus madres aborten los necesitan para asesinarlos junto a sus madres.

Gaucín- Serranía de Ronda- Andalucía

Antonio Molina Medina

12.10.23

FRENTE A SU FINAL (ORDUÑA)

 

La muy noble y leal ciudad de Orduña Bizkaia País Basco

“La poesía es bastante peligrosa para los malos gobiernos. La palabra paz está siendo tan grave, que muchos no se atreven a pronunciarla. Y como yo escribo poesía y pronuncio en voz alta la palabra paz, me pasan estos accidentes. En un tren, los policías me dijeron: “somos padres de familia, tenemos que cumplir estas órdenes repugnantes. Por favor, déjenos un autógrafo para nuestros hijos ya que ellos no serán policías”.

Pablo Neruda 

 

Ciudad de Orduña- Bizkaia

FRENTE A SU FINAL (ORDUÑA)

Ya al filo de la nada, donde todo finiquita y se hace polvo y agua después de haber visto elevarse a minúsculos seres que están inscritos dentro de su corazón, ya desde la cuna, en las aulas de los templos del saber dónde te enseñaban a leer y escribir y a ser persona, seres serios y amables, y queridos No perdíamos de vista sus gestos y sus palabras, las que nos hicieron libres en pensamiento y grande en nuestro corazón; dejándonos el campo abierto de mensajes que nos hablaban de amor y de esperanza. ¿Verdad que sí? ¡D. Benito! ¡Es la verdad d. Perpetuo…! y expuesto por d. Agustín.

 

Ciudad de Orduña Bizkaia

Hoy, con nostalgia, nos enfrentamos a sus quehaceres los que nos deslumbraban y nos acompañan junto a las culebras que, mansas y sin pudor, nos escoltaban en nuestras tardes, aciagas pero libres, por los descampados lugares de nuestros años de verdades y aulas repletas de mariposas que volaban entre las letras de nuestra juventud con la rebeldía que nos protegía de la nada.

 

Algunos, sedientos de símbolos, caminábamos montados en borriquillos siguiendo al Señor Quijote de la Mancha y sin atrevernos a diseminarse entre animales bravíos. Como una piña, los sentimientos se planifican entre los componentes de nuestros sueños, agilizados por la contundencia de los trigales oscuros que defraudaron nuestro concepto de libertad.

 

Orduña Bizkaia

Sigilosos sus cuerpos, nos acercábamos alrededor de la lumbre o 
de la chapa caliente, con los oídos al vuelo tras las notas doradas de historias que nos hacían enmudecer y asustar; metáforas sensuales y notas musicales cuyos soniquetes quizá… nos acercaban a la verdad.

 

Ser ciudadanos de principios, y agasajar a nuestro mayores junto a los representados, seres que nausean verdades incomprensibles para nuestra edad.

Mientras, de las llamas que se elevaban por las chimeneas de las casas, volaban ilusiones y tiernas metáforas o deliciosos relatos de guerras pasadas que, mejor olvidar; mientras los grajos revoloteaban por los campos y arbolados, como pájaros de mal agüero, se infiltraron entre los comensales dejándonos perplejos de la osadía, aunque ninguna de esa era observada antinatural.

 

Ciudad de Orduña Bizkaia País Basco

Al final, todo es natural y comprensible, ya que, de la música, nos salpican sus notas por el pentagrama de nuestra propia existencia que, incolora e imprudente, se acuesta en el oasis del vivir.

03.10.23 

Antonio Molina Medina