REALIDAD

Dime la verdad.
No ocultes mi destino,
que mi cuerpo reposa
protegido de puntas
que se han clavado en mi piel
aterida de frío.
 
Todo está consumado.
Mi corazón... partido,
soportando las horas
de su muerte. Un suspiro.
 
Sé que mi sombra
me quiere abandonar.
Llegó la hora triste y real.
Su soledad, vuelve a sonar.
Antonio Molina Medina