POR CASTILLA… BUSCANDO SU MAGIA

 

Sinovas-Pedanía de Aranda de Duero

No sé… Así es…- dijo-… no sé… -repetía.

Porque mira tanto al campo a los matorrales cercanos…lejanos…

Las choperas que, adormecidas, languidecen en sus ramas y se

ofrecen a sus manos. Ellas le ‘ensombrean’, no le hacen daño 

y se acercan con su candor a su lado. Los rastrojos, al pisarlos,

crujen llorosos como los de antaño y se clavan, resecos, en sus

pies descalzos. Pero ellos siguen y siguen caminando, buscando

entre los residuos de trigo, su nombre. Su cuerpo, su figura, su

aliento y su sabia, que descubre a través del viento, resbalando

entre viñas azotando su rostro, que es el que les pone en contacto.

Mira que mira al horizonte y sigue sin pauta mirando.

 

Sinovas-Pedanía de Aranda de Duero

Como sabe que estás ahí, observándola entre pastos. Sube sus ojos y

levanta la vista al horizonte y no se cansa de sonreír…, de sonreir.

Porque su mirada restriega lo no alcanzado, porque ella esta…, en la

inmensidad del páramo. La hojarasca cruje cuando siente sus pasos.

Le saludan hasta los lagartos, porque te busca y la busca,

caminando entre peñascos. Los ríos abren sus aguas para que

continúen sus pasos. Le saludan los arroyos y le acompañan

todo el día el trino de muchos pájaros. Los pequeños arroyos se

secan cuando le presagian, porque el agua le acompaña entre las

gotas que surcan por los caños de su cara y se pierden en sus manos.

Sigue y sigue caminando. Aunque los pasos sean lentos y su

corazón jadeé, él seguirá caminando. Lentos pasos al compás

de los tañidos de ese corazón lozano, que busca y rebusca en el

horizonte sus besos y sus abrazos. Su cuerpo, su corazón y su

alma hecha retazos…; y algo de respiración que ya le sigue faltando.

Sinovas-Pedanía de Aranda de Duero
El día que él la encuentre, florecerán los almendros y 

La luna sonreirá caminando tras sus pasos. El rosal adelantará sus tallos

aunque este en su largo letargo: las sombras, sus sombras, se

unirán para ser una única sombra, coagulada por los senderos

sedientas de verdes cantos.

Sinovas-Pedanía de Aranda de Duero
Antonio Molina Medina

25/10/15