SANGRE NUEVA


 

Quisiera ser puente de plata

que tú pasases descalza por su estela,

con la cesta repleta de ilusiones

todas realizables, y llenar con ella la despensa.

 

El largo inviernos nos invade.

Muerde la noche. Se mastica el trigo.

Llévame con tu bruma, dándome tu cobijo.

Hiéreme con las púas que protegen la rosa

 

que vivifican tu cuerpo sangre roja que es vida

y reaviva la vieja que aunque siga muy roja,

límpiala con tu esfinge y que pueda con ella

enjuagarme la boca, de impurezas vividas.

 

Antonio Molina