Hoy
he pintado, encalado
de
blanco las paredes.
El
techo… un verde como…
Hierba
de su huerto.
La
mesa como siempre,
limpia
hasta sus cajones.
Y
las sillas brillan
como
el oro en tus bordados.
La
puerta no tiene cerradura
pero
sólo con mirarla
sola
se incorpora a tu brisa.
Hoy
he puesto el corazón
y
el alma para limpiarla.
La
silla y el armario
con
los recuerdos
que
tú me dejaste.
“Cuando te recuerdo”
Son
recuerdos que abrasan,
que
atenazan mi cuerpo y dan
alas
a mi alma y la hace de fuego...,
Y
la siente con calma..., la calma.
Son
tus letras de sueños, las que
brotan
sus dedos, las que sangran
por
dentro…, las de estrellas
que
le hablan.
06/04/17
Antonio
Molina Medina