LAMENTO DE CAMPANAS

 

Sinovas Pedanía de -Aranda de Duero-

Desde las praderas de su Castilla,

contemplo los pájaros en libertad y

me hago silencio. Me incita su viento,

mi cuerpo se hace hoja, tallo, tierra

barro, luz y sueño, junto a los abetos

junto a los pinos añejos, contando los aros,

los años de su larga vida sembrados en

sus campos que atrapan mi cuerpo. Y

me sonrío y cierro los ojos, siento sus lamentos,

y me acoplo a su cuerpo, cuerpo dolorido

para desprender mente y cuerpo.

Y me hago materia con ellos, ya que son

el alimento que siempre encuentro

entre las hojas, del tiempo y de libros que me

hablan de ellos. Pero la noche no ceja en su empeño

Y la oscuridad nos envuelve de nuevo

para llevarse entre lágrimas a aquellos

que tanto queremos. No somos diferentes,

vivimos entre pastores, formamos parte del paisaje

y nos congratulamos en ellos.

Hoy la muerte nos indica que somos igual que ellos.

Luce la claridad en su pedanía.

Una vez más un lucero secundara nuestra sombra

en lo más alto del cielo, que brillara con luz

en nuestra mente… nuestros sueños.

23/01/17

Antonio Molina Medina