GRITOS Y PALABRAS

 

Sinovas-Aranda de Duero- Castilla y León

Las palabras se mezclan y se hacen versos incapaces de percibirse por los oídos insensibles. Ni el ojo humano  puede penetrar, ni la inteligencia puede apreciar su contenido. Y, ni la ciencia, ni el poder, ni el estado de ánimo, ni el vil metal darán con él… Solo el corazón y los seres que sedientos de vida  -son las vidas ¡sus vidas! lo que muchos perseguimos- somos capaces de alcanzar la dicha de ese secreto donde lo real y la ilusión, son hechos gratuitos y que todos poseemos… y que son nuestros, son de todos los que mantienen la ilusión agraciada que a todos nos ofrecen los vientos.

 

Los poetas perciben su aliento en el soplo del aire  cuando componen un verso junto a los textos que, amablemente, se posan atrapados por sus dedos cual mariposas que placen de sus leyendas… Y no habrá escultor que cincela, ni pintor que armonice, ni cantor, ni orador, que sea capaz de descubrir y plasmar lo que implica su llanto.

 

Río Nervión-Basauri-Bizkaia

Entre la indiferencia; entre prados, montañas y la arboleda semilla de los bosques de pinos y nogales, y encinas y alcornoques,  gimen la fuerza del hacha que corta su piel la que hasta los ineptos y alguna mosca le incomode. Sorprendidos por su aire las luciérnagas iluminaban el entorno de sus pasos caminando sobre la fresca y jugosa hierba que pisaron sus ancestros.

 

Mientras, en las ciudades repletas de cuerpos que se mueven con prisa, la sangre se filtra por los rincones de su imaginación sin prisa, con pisadas que retumban baldosas: son el laberinto de dioses antiguos, de la miel que producen las abejas. Del llanto, cuyos zumbidos se posan en sus oídos proyectando su sonar desde el nuevo amanecer. El nacido inconsciente, tan hermoso y extraño. Y el que, muerto, nos mira a los ojos mientras descansa su cuerpo entre velas de ataúd.

 

Las estrellas se esconden, se pliegan y se alejan, cuando la noche nochera desisten los sueños a medio realizar ya que la claridad de su alborada, perdura día tras día en hacernos vivir nuestras realidades, deseemos o no… Son palabras tenues las que deambulan por nuestro cerebro, palabras ¡solo palabras! que todo lo abarcan…, que todo lo llena, hasta las cloacas de nuestro corazón.

 

Peña Salvada-Orduña-Bizkaia

Pero hay que buscarlas (cuantos montes divisados y que por pereza no los hemos coronado). Cuantos caminos andados, veredas compartidas, trenes entre railes que pasaron y los dejamos sin ojear. Cuánto ser que partió a otros mundos, donde buscaba su libertad y un cuscurro de alimento y un libro para soñar. Cuantos seres extraídos con la mente encelada en los bolsillos vacíos y el alma repleta de letras, de papiros y arte, y pinceles que quedaron sin atrapar. Cuanta porción de tierra cultivada, sin roturar que el parásito contempla, donde el amor nunca llega, ni a la tierra su sembrar.

 

Hoy buscamos el amor que nos hizo nacer, el que de nacidos nos dieron y sentimos. El primero, el primer beso que dimos o el primer beso que nos dieron.

 

Martirizaron su cuerpo y lo hicieron inservible, mutilaron sus sentidos y nos robaron hasta el alma, pero despertó su cuerpo y su mente gritó: ¡Busca un cuerpo perfecto! Para seguir demostrando el orgullo de tratar de ser perfecto. Mientras, por atrás del cieno, está llorando por su cuerpo ya que es viejo. Quizás ya putrefacto pero su mente galopa por las cepas y racimos de sueños entre viñedos del tiempo, por prados y por trigales cuyas espigas se balancean con la brisa de su invierno.

 

Pais Basko


¿Quién dice que no estás enamorado?

 

¿Quién protege  sus ilusiones que nunca se sienten llenas?

 

La tierra que nos hospeda y nos devoran los surcos, a la que él se aferra. Le atrapa su pulpa, y le quema su candela… y él, loco de atar, buscó los surcos recién abiertos, para expandir las semillas del semillero del sueño, donde el fruto quedará antes de su partida… tierra nuestra sin lamentos.

Antonio Molina Medina

27.11.22.