![]() |
Señor. Bombín. Señora. María Mata y el autor. Valderrubio Granada |
María… Federico estuvo contigo el muy puñetero...
yo lo vi cómo se deslizaba por la sala y en cuerpo
entero, sigiloso nos miraba y yo observe su cara
era la que me protege incluso desde mi almohada,
junto a su risa y tu brisa, para sofocar el calor que
mi cuerpo deposita entre sabanas de plata y dijo...
me dijo:
¡Que calor brotó en su noche!
¡Que dolor sintió mi alma!
Mi corazón zozobraba
ante todo el poderío
que su sombra nos regaba.
¡Cómo se mecían los mimbres!
¡Que cerquita estaba el agua!
Y yo solo, y voluptuoso
Con ansia, solo lo miraba… los minaba.
Federico le da vida.
¡Nos abrazaba su cuerpo en la sala!
Suspiros… solo suspiros,
brotaban desde su casa.
Era Frasquita-Bernarda la
que, corría por la estancia.
Sus hijas la acompañaban.
Con el calor de la noche
noche nochera del alma.
Mientras el Romano le habla.
Sueños de agua y fuego
se convierten entre lágrimas,
que desbordaban sus ansias.
17.01.21
Antonio Molina Medina