CAMINA

Hace ya tiempo que escogió un camino lleno de espinas entre zarzales resecos, cuyos aguijones mortifican su cuerpo. Nada le hará cambiar. Dejar que los sentimientos se deslicen por el manantial de las montañas, hacen posible que nos sintamos útiles y al servicio de un mundo que ha perdido el rumbo y el interés.
Cuando los ríos siguen su curso sin descanso, pasan los siglos y solo me queda decir que la libertad bien entendida es lo más sagrado que un ser humano pueda conseguir... Libertad sin cuentagotas.
Amando todo lo que se mueve en la sabana. Como bien dijo  WHITMAN:
“El corazón de los hombres y de las mujeres es todo amor.
Sólo el del amor; el del amor que teje, encierra y se difunde por doquier.”


Antonio Molina Medina