LUCÍA MOLINA MARTÍN

Para mi nieta Lucía.

Te conocí en el vientre de tu madre.
Brotó dentro de mí, amor inmaculado.
Cual manantial, emergió entre montañas,
apaciguando mi vida atormentada.

Naciste de seres que te adoran,
que se envuelven contigo y se recrean.
Serás, manjar perdurable en su despensa.
Y mantendrás mi vida en continua primavera.

Que tu rebeldía sea mi alegría y para ti,
lucidez y frescura, para alegrar la vida
de aquellos que contigo vivan.
Tendrás un mundo esquivo
que superarás con fe y gallardía.
18/05/17

Antonio Molina Medina