Somos palabras.

Somos palabras.
Y entre sombras caminamos
salpicando gotas de poesía.
Tinta vieja se derrama
sobre pergaminos añosos
que el viento esparce sobre
renglones imperfectos.
Pasando a las hojas de nuestro
libro paterno, buscando
entre ellas  resquicio de la
historia primera, que alumbraba
rincones, horizontes lejanos
al final del camino trazado.
El invierno retorna encontrando
Sembrado el trigo y la cebada.
Al filo de la noche,
la luna nos alumbra
y su sombra protege
nuestra sombra calmada.
Donde me cobijo
confiando que su esfera
me descubra el lucero
Entre ramas.
27/10/16

Antonio Molina Medina