HOLA AMIGA…


Hola amiga, levantarse y desayunar con tu recuerdo es manjar que pocos aprecian. Algunos, cuando caminan desperezándose, se acuerden de ti con una sonrisa. Eso es verdad, es evidente porque la materia resplandece con el sol y cuando la Luna divisa en el firmamento su sombra, tu sombra, indica a los mortales la figura de tu cuerpo. Pero algo más tiene de mágico tu esqueleto que está con mucha fuerza en mi interior, me apasiona y me hace vivir intensamente recuerdos mágicos que no quiero olvidar. La mujer que yo intuyo y presiento, no sólo por intuir ni por pasión, esa otra mujer que pocos ven, es algo más que cuerpo. Tu corazón es algarabía y sueños, haces volar a los que te queremos. Eres dulzura embrión de muchos sueños con mente sabia llena de ilusiones. No tiene precio poder estar a tu lado disfrutando con tu interior querida amiga. Quererte es poco. Amarte hasta la locura es perdonable. Todo te lo doy, ya nada tengo. Seguir a tu lado es el mayor acierto que he realizado en su corta vida, porque lo anterior no era vida, solo sombras y silencio.

Mujer, si esto no es amor, que venga el mundo y lo des-diga. Un fiel amante que se cobija entre sus brazos, pletórico de sueños, copula con el viento como gigantes de sueños.

Antonio Molina Medina