ELLA

Me acurrucaría en sus brazos
escuchando los latidos
que manan del corazón.
Ese músculo divino
donde salpica la vida,
bomba celeste es
que jugosa riega
alegre, cuerda,
todos los vasos
que florecen de su jardín,
donde se encontró la rosa
más hermosa,
que pudo él contemplar jamás.


Antonio Molina Medina