Orduña y la Sima

 

La Sima- Ciudad de Orduña- Bizkaia- País Basco

Abundan los prólogos de ficción recolectora, en los que Bécquer manifiesta que actúa como simple retransmisor de informaciones orales, simple cronista de historias escuchadas.

 Gustavo Adolfo Bécquer.

 

Ciudadela primeriza de Orduña. Bizkaia- País Basco

Orduña y la Sima

Me abisme en las profundas aguas de la Sima.

Descendiendo con su menudo cuerpo reluciente

de ilusiones, sueños y oscuridad.

Su cuerpo desciende sin freno ni cautela, hasta que

la oscuridad entorpece su caída.

Pórtico de la primera iglesia de Orduña Bizkaia. País Basco


Se angustian sus sentidos y la alarma penetra

aleccionando a su cuerpo, tratando de doblar su figura

para encontrarse de nuevo con la claridad.

La vida se le escapa son momentos de solo soledad…

ni llanto, ni risa, ni sueños que le atrapen…

Fuente con vaso de oro y agua para la vida, Orduña, Bizkaia


Solo oscuridad, ya que la suntuosidad era innecesaria y

la luz era como una nostalgia sin insensibilizar de su instinto;

las brazadas de agua esparcieron sus miedos dejando

al descubierto lo sencillo y sin lujos de como

la muerte nos ronda… preludio de lo poco que somos

aun teniéndolo todo…

Caminar por la niebla puede ser un peligro

en nuestra primera edad.

Plaza de la ciudad de Orduña- Bizkaia- País Basco


18.12.24  

Antonio Molina Medina