Sinovas-Aranda de Duero-Castilla León |
Estás
callada, pero no ausente. Quizás cabizbaja, pero se te siente, ya que el
corazón es algo más que una señal, quizás sea una catapulta que hasta aquí haga
llegar sus piedras: algunas bien talladas. O esculpidas con los dedos de tus
manos. O, con esos ojos que dejan que la luz se explaye en su
tronera y, como un candil fiero y reluciente, se pose hoy, en tu frente y haga
que traspase los mares y ríos y montañas aún sin el sol, que los alumbre… Pero
con ese corazón que denota que está siempre presente entre las vaguadas de tus
sueños.
Valle de Orduña-Bizkaia |
Tus
sueños, como anillos de oro o de plata, son las señales por las que mi alma se
posa entre tus brazos y, dejando caer sobre la sombra que da tu cuerpo, hace
más llevadera la vida. Y los sueños arrancan día y noche, entre las plegarias
de tus versos, la luz que hay entre sus letras con sabor a sentimientos muy
abiertos, plagados de lágrimas y deseos que mis labios absorben por los
senderos que camino; por esas tierras que venero, como son las de la Castilla
de mis sueños, por donde camino entre barbechos acompañado por pastores y
ovejas, y los sueños del pastor que sonríe junto a sus perros que, suavemente,
azuzan a sus ovejas mientras su señor y amo y zagal, las deja pastar por los
nuevos tallos de hierba recién nacida en los campos de rastrojo en su invierno.
Rio de la Miel. El Cobre. Parque de los Alcornocales. Andalucía |
26.11.18
Antonio
Molina Medina