CAMINANDO… SOY

 

Orduña- Bizkaia- País Basco



 CAMINANDO… SOY

“Buenos días divinidad.”

Ayer fue un día más bien sensible.

Comimos con mi nieta y una prima

segunda mía que, está resucitando

de la muerte de su compañero.

Aquí estamos de paso y nadie decide

cuando se cesa el respirar.

 

Pero menos palabras dolorosas y más

recuerdos jugosos.

La vida continúa y hay que cogerla con

la fuerza que dan los sentimientos.

Y tú de eso sabes tanto….

 

Orduña- Bizkaia- País Basco

Que acudiría a tus clases, convencido de

aprender de tus hechos.

Hoy mi mente se rebela, intentando

denunciar lugares hermosos expuestos a

una tragedia por un posible fuego tras

el abandono total.

Como soy un soñador, suelo recorrer

lugares muy hermosos

pero aquí hacen las obras y luego

se echan a dormir...,

hasta que ocurre lo inevitable.

 

Getares- Algeciras

Y si que he tenido sueños amiga mía.

Sueños de juncos cercanos a mi río,

envuelto en la sombra que da

tu figura, que se deja notar.

Y cada día más profundo, más intenso

su nube, la que nos protege y

nos llena de gozo.

 

Miro los barcos que se pasean por el Estrecho

vislumbrando sus nombres,

buscando el tuyo entre ellos,

para dejarme recorrer acompañando a mi alma.

 

Getares- Andalucía

Mi corazón este embutido en tu cuerpo,

para acompañarte en los malos y

buenos sentimientos.

¡Cuánto daría amiga mía!

Sólo por escuchar

los sonidos en tu respirar..., y tu abrigar...

 

Sentirte. Y mirar tus ojos frente a frente,

impregnado por los rayos que desprende tu mirada.

Ya que eres para mí un orgullo, poder

mencionar tu nombre y sentirme muy seguro

compartiendo tus versos y el contenido de

todas sus palabras las que tu respirar

se unan con mis sueños.

 

Sinovas- Castilla y León

Y volaremos entre nubes con alas de libertad y

sentimientos que nos anidan.

 

Mirando la ventana del mundo.

Asumiendo que la naturaleza es nuestro futuro.

Los olivos se desperezan y la tierra

arremete contra los que la quieren suprimir

por nuestra torpeza dejándola morir

entre muros de cemento y brasas incendiarias.

Sinovas- Castilla León


 29.12.24

Antonio Molina Medina

LA NAVIDAD

 

Museo de Orduña- Bizkaia- País Basco

“Queridos amigos: Hace tiempo hice firme promesa de rechazar toda clase de homenajes, banquetes o fiestas que se hicieran a mi modesta persona; primero, por entender que cada uno de ellos pone un ladrillo sobre nuestra tumba literaria, y segundo, porque he visto que no hay cosa más desolada que el discurso frío en nuestro honor, ni momento más triste que el aplauso organizado, aunque sea de buena fe.”

Federico García Lorca

 

La muy noble y leal ciudad de Orduña- Bizkaia- País Basco

LA NAVIDAD

Hoy me dices: “que te acompaña un "cálido" sonido el viento, está nublado... el ambiente es de navidades pasadas en la niñez, cuando "mi navidad" no empezaba el primer domingo de adviento, se ajustaban los gastos y casi siempre estaba resfriada”.

 

Getares- Pentagrama- Andalucía

Mientras mis recuerdos emergen ya sin miedo, ora llevaderos de andrajosas aguas que estuvieron detenidas y depravadas por su tiempo ya deshumanizadas y con signos destructivos por la miseria humana que iba deteriorando su intelecto en su agua desteñida.

 

Hoy circulan con fuerza sus pensamientos protegidos por las hojas de los manuales, bien comprimidos de verdades inamovibles, y ya agregados a su cuerpo con palabras acomodadas a su entendimiento; aunque se mezclen con las ajadas y viejas fieras del sufrimiento, de su enjuto y silbante y propio pasado por lo incierto y oscuro de lo humano…          

 

El Cobre- Chorrosquina- Andalucía

Hoy, sus pensamientos andan de un lado a otro de ese tiempo descubierto, ya que las palabras fueron hechas aire, para poder respirar su contenido; fueron emboscadas entre el polvo añoso de sus años, enredado con los armarios desnudos de valor, ya sin valía humana, mientras palpaba la molesta y oculta transigencia, la que insistía en el poco valor que se guardaba en ese armario sin cerradura. Aunque la curiosidad y la palabra hablada le incitaba a mirar por algunas de las fisuras por donde vadeaba los susurros de esas letras amontonadas, que lo deslumbraban a gritos mientras transitaba por su estancia; la fuerza del conocimiento le calentaba, los renglones a la sazón, fuego rojizo el que salía cuando el sol las alumbraba antes de ocultarse, mientras su mente las acariciaba antes de que la sombra las ocultase.

 

San Nicolás de Bari- Sinovas

Ya la luz se instaló en su corazón de la que su disfrute le azuzaba mientras el aire ya repoblado de sustancias dejó que sus pensamientos, dentro y fuera de su mente, caracoleando con vivencias nuevas y ángeles sin alas que se camuflan; mientras sus harapos se sumergen hoy adictos a la sonrisa, ya desgranada y disuelta, entre sus genes.  Sin olvidar las noches con calma donde compartimos hasta la escasez y la esperanza.

Sinovas- Castilla y León-


04.12.24 

Antonio Molina Medina 

LA NAVIDAD SE DEJA SENTIR

Orduña- Bizkaia- País Basco


 “Como el arte de profetizar el pasado, se ha definido burlonamente la filosofía de la Historia. En realidad, cuando meditamos sobre el pasado para enterarnos de lo que llevaba dentro, es fácil que encontremos en él un cúmulo de esperanzas no logradas, pero tampoco fallidas un futuro, en suma, objeto legítimo de profecía.”

Antonio Machado   

Plaza de Orduña- Bizkaia- País Basco


LA NAVIDAD SE DEJA SENTIR

Restos de la historia

que aflora en mis

evocaciones.

Conjunto de familias

insertas en la vida,

que pasan lentamente y

en silencio.

Familias con arraigo,

arrancadas de su tierra,

que amaban sus costumbres

dentro de su pobreza,

pero con dignidad.

 

Museo de Orduña- Bizkaia- País Basco

Añoranza bendita

de un tiempo postrero

que queda para el recuerdo,

para el delirio, para

su evocación.

Pensamiento divino de

un viejo atardecer y que

le inculcaron en nuestro sueño;

AMOR a todo lo hermoso,

a toda la belleza

que aflora en nuestra tierra.

Orduña- Bizkaia- País Basco


También nuestros mayores

nos hacían recordar,

aquéllos que en su día

nos precedieron,

los que con su sangre

mejoraron este mundo

donde poder vivir.

 

Museo de Orduña- Bizkaia- País Basco

Sabrosos recuerdos

que salpicaron mi vida

que, con agrado, siento

que penetran en mi cuerpo y

que no debo olvidar.

 

Aquellas Noches Buenas

llenas de pobreza,

de humildes personajes

que pusieron su alma

en hacernos felices.

 

Cuidad de Orduña- Bizkaia - País Basco

Con pocos recursos,

sin grandes aspavientos,

ni mesas suculentas

repletas de infinitos manjares

que llenarán nuestro estómago

para nuestra subsistencia.

 

Eran gente sencilla,

amantes de otros seres

que todo lo compartían:

esas pequeñas alegrías

que hacían de la familia

momentos de grandeza

que un día no lejano

agrandaron nuestra pequeñez.

 

Sentíamos a Dios, que

nos tocaba con su sabia

y nos ayudaba a sobrevivir

a pesar de nuestra miseria.

 

Ciudad de Orduña- Bizkaia- País Basco

Creencias que nos allanaron

el duro camino que,

nos hacía felices

a pesar de nuestra desdicha,

por nuestra condición

de ser hombres sin tierra

en una tierra virgen,

que un día nos enseñaron

respeto y cariño,

a sentirnos queridos

y también a querer.

22.12.24

Antonio Molina Medina

GAUCÍN. SIERRA MORENA. ANDALUCÍA

 

Gaucín- Andalucía

“Se suele decir que el buen escritor es el que sabe mirar. Ver más allá de lo que aparece a simple vista. Mirar con mirada singular. La mirada conduce a la descripción y la descripción debe sugerir también los hechos. El estado de ánimo del que mira influye en la descripción. ¿Influye también desde dónde se mira? CONSIGNA: Espía y anota, relata mejor, lo que ves a través de las siguientes aberturas. Procura que lo que observas te lleva a hechos, acciones… Es decir, a un relato pues, en definitiva, estás espiando relatos.”

Pablo Picasso.

 

Gaucín- Andalucía

GAUCÍN. SIERRA MORENA. ANDALUCÍA

Surgen a nuestros ojos en la ladera de la montaña repleta de adornos de cal blanca la que provenía de sus casas, y, sobre su altura, bien plantado, la figura de su castillo bien ataviado de restos amurallados y defensivos los que dominan el paisaje por donde se recrea su mirada convirtiéndola en el silencio donde posan los sentidos sin pausa.   

 

Gaucín- Andalucía

Quizás sea que, lo que se siente al comprender la belleza que penetra por sus ojos, sea necesario expresarlo. Y mecerse con el paisaje y entre el verdor de sus laderas, ante la desnuda y fértil y añorada alborada. Mientras, de los rayos de luz, su calor nos atrapaba, entre los sonidos de las chicharras las que gritaban aferradas a los cuerpos de las encinas cuyo tronco las abrazaba con su corteza.

 

Gaucín- Andalucía

Desde la cumbre de la ciudad, a la sombra de su castillo, contemplamos la urbe rodeada de su naturaleza que se aferra y se acomoda por la ladera de su montaña aún protegida por los cañones de salvas hoy de bienvenidos. Caminamos por sus calles estrechas y el blanco de sus casas las que, eternas, florecen sin pausa una detrás de otra interrumpidas por las calles sedientas de frescor y eternas de grandeza.

 

Gaucín- Andalucía

La madrugada ha sido plácida doncella de donde emerge el calor de esa lumbrera que desprenden los rayos del sol que queman hasta nuestra conciencia.

El contorno de sus montañas engrandece su figura y la hace grande en el tiempo. Nos posamos en ella entre alberos de donde aflora su estirpe, sus inicios envuelta en su belleza; mientras nuestros estómagos de agitan esperando la pitanza que nos ofrece sus mesones.

 

LA TABERNA DEL ZORRO- Gaucín- Andalucía

El silencio se hace patente caminando por ella. Ella resplandece radiante, incluso desde la distancia, como un torrente de miel que engrandece su montaña; iluminada por el astro sol que, con sus rayos, provoca destellos sobre ella, y la embellece y la ennoblece, cual estrella. Cae la tarde y placen las cigüeñas, las águilas revolotean, mientras los ciervos despuntan para pasearse por ella.

 

Castillo de Gaucín- Andalucía

Dos caminos de entrada y el monte verde y blanco por bandera… Una voz se mece en la noche, noche nochera, de trinos, de voces añosas y nobles. Serán las que encauzan los sueños en esta sierra encrespada por donde placen sueños de voces antiguas, con su botafuego al lado de sus cañones y los voceríos que se deslizan, airosos, por la falda de la sierra, llevando entre sus monturas los retintines de la serranía al compás de su hermosura. Y compartiendo ese soniquete de las palabras, entre pisadas antiguas que ennoblecen su ladera junto al respirar de sus gentes ese aire noble y persistente el que dejamos entre el serpentear de su salida, dejando tras nuestro su desparramada y eterna figura por las montañas con vida.   

13.09.24  

Antonio Molina Medina

ORDUÑA

 

Valle de Orduña- Bizkaia- País Basco

ORDUÑA

Y volví una vez más a beber del vaso de oro de donde brotaba el agua cargada de paciencia; para que mis pasos transiten sin prisas por los caminos de carros y de bueyes y de ganado que dejaron las pezuñas ya sagradas por el recorrido de nuestra memoria y que hoy pisan con años de existencia.

 

Orduña- Bizkaia- País Basco

Sendero ordenado, capaz de abarcar los carros llevados por bueyes dejando un reguero de marcas de sus ruedas de madera y anillos de acero, cargados y repletos del oro rojo del trigo de sus campos, acoplados a sus cartolas al paso lento, muy lento, de bueyes bien adiestrados camino de las plazas redondas de la esperanza. Entre las ovejas, y vacas y cerdos caminaba su cuerpo dejando y pisando sus rastros entre el verde, verde de olas, que catapultó su figura escuchando el sonido de las pisadas sagradas de los que nos precedieron, entre tiernos brazaletes de flores que nos adornaban con sus verdes ramas, los arcos del camino; sereno y ganador, confinado su cuerpo por donde caminaba. 

 

Orduña-Bizkaia- País Basco

Le salieron al paso, los sonidos y movimientos de la naturaleza: lagartos, serpientes, escarabajos, algún tipo extraviado, y algún ratoncillo descuidado que le saludaban extrañados ante la asonancia de sus pasos; mientras las vacas pastaban sin sueños que, ante la presencia de un ser extraño, observaban su presencia levantando la cabeza y con sus ojos le observaban, rumiando la hierba que les ofrecía su estómago ya saciado.

Sonríe sus conocimientos sobre el ganado y se aleja de ellos, que no apartan la mirada de su figura para, ellas extraña.

 

Orduña- Bizkaia- País Basco

Sigue rodeando la ciudad. Vista desde la lejanía, se erige altiva ante los caminantes que la devoran con sus ojos, rodeada por el ‘bosque-zar’ que la envuelve, atrapada entre sus murallas, traspasando sus siglos de historia. Vuelan sus inclinaciones; mientras su mano agacha la frente de los bueyes que tiran de sus inclinaciones, abriendo la puerta que acarrea su mente y hacen revolotear a los pájaros entre las espigas, ellas, muy doradas, repletas de granos.

 

Tertanga-Álaba- País Basco

Puso su cuerpo en reposo en la verja del cementerio de ‘Tertanga’ para descender al pueblo de los labriegos, edificios añejos le daban su sombra mientras, de sus fuentes, el agua fresca y clara caía abundantemente al pilón de la esperanza. Los lavaderos de antaño, reposaban sus aguas cumpliendo años.

 

Tertanga- Alaba- País Basco

El tiempo se precipita y él busca la sombra de la montaña, saludado por el río el que se descuelga de su pico: El fraile; el sonido del agua le introduce en un riachuelo glorioso de agua fértil y sin impurezas, y se acerca a la hondonada y relucen las ascuas de la verdad, de donde el campesino se nutre de su humedad, sus pasos catapultan el silencio ante el final de la explanada. Y su vuelta será entre el asfalto, dejando sus orillas, cercano a su puente, sediento de sueños, higueras cargadas de frutos que brotan de su río, que aún se mantienen cercanas a sus casas y sigue por el asfalto ya que el valle y la ciudad de Orduña le llama. Antes de adentrarse, sus pasos se licuan entre las viñas ya destetados sus racimos, cuyas hojas van cayendo al final del precipicio.

 

Plaza y fuente de Orduña- Bizkaia- País Basco

La ciudad le espera y él va en su busca… buscando su plaza, su fuente de agua clara, la que en su día le dio la vida sin pausa, ya que siempre estaba disponible para alcanzar su líquido que protegía su cuerpo y su alma. Mientras, las ventanas añosas del cuartel peregrino de tantas hazañas, adornaban su plaza junto al púlpito de la música y su jardín de plata.

 

Plaza de Orduña- Bizkaia- País Basco

La danza se enmudece y las parejas se alejan, y el silencio se explaya en su jaula nocturna. Mientras, él sueña momentos gratos; maestros con alma y corazón templado a los que él mira desde su alma que sigue peregrinando, acelerado y sin pausa, asimismo su sangre hostiga sus venas, recorriendo su cuerpo a través de los senderos que conducen a la fuente y su plaza de la que, en otro tiempo, bebía y la degustaba.

Orduña- Bizkaia- País Basco


14.11.24        

Antonio Molina Medina