En una espléndida loma,
a lo lejos su silueta se divisa
montado en caballo tordo
y con una silla de cuero.
Su figura es
espigada
piel canela con su pelo
cubierto, sombrero de paja,
con adornos de terciopelo.
Galopa por la
pradera
por esos prados espesos
que llenos están de nostalgia
que el sol se ensaña con ellos.
Con el lazo entre
las manos
galopando tras las reses
demostrado su bravía
por las lomas de su aldea.
Campos que tú
galopando
domabas a tus caballos
que hoy buscamos tu figura
por los montes y los llanos.
Antonio Molina
Antonio..." Baltasar ..."
ResponderEliminarHermosas letras dedicadas a ese domador
de caballos.
un beso desde Argentina
Gracias Doris... También nos domaban a nosotros y nos hicieron fuetes ante la adversidad y el hambre, pero, ya a nadie le importan estos tipos de hombres, que lo dieron todo por los suyos y su tierra.
Eliminarun beso
Antonio