Juglar de
manos firmes y libres
Ojos vivos
como el águila
Sabes forjar
anillos con espinas
Éfeso
enmudecería con tu arte
Luciéndolo
en la torre de la Palma
Ufanos los
presentes discernían
Inmersos
contemplando tus espigas
Sorbiendo
tus palabras con dulzura
Paladeando
tus explicaciones serenas
Anonadados
contemplamos tu obra
Vanagloriándonos
de haberte conocido
Órgano forma
tu estructura
Nacarados
sonidos brotan de tus manos
Antonio Molina
Precioso, Antonio...
ResponderEliminarHay mucha magia en los relojes y en las manos de los relojeros...
Paso a dejarte toda mi admiración por el blog tan bonito que tienes y por la belleza de tus letras. Te pido mil disculpas por no haberlo hecho antes, pero Blogger no me mostraba las "cajitas" para escribir, en muchísimos de mis blogs amigos, y me era imposible hacerlo, pero sí leeros. Ahora parece el problema ya resuelto, por lo que espero poderte dejar mi pequeña huella, tanto como me sea posible, ya que no tengo demasiado tiempo.
Un abrazo.
LOLA
Gracias Lola. Es para mi un lujo que te pases por esta solitaria ventana.
EliminarEste humilde relojero lleva en sus manos un montón de relojes de la zona en el Campo de Gibraltar. Algeciras, Trifa, Cádiz y un largo etcétera...
un abrazo
Antonio
Qué bonito regalo, Antonio. Seguro que José estará encantado, casi tanto como yo de conocerle a él a través de tus palabras.
ResponderEliminarBesos y abrazos, esta vez a repartir entre los dos.
Gracias chavala... El mayor regalo es tenerte en esta ventana.
Eliminarun beso
Antonio