por eso
actuamos sin mirar a los lados,
sin pensar en
lo hecho ni en seguir camuflados.
Sólo siento un
poder de plegaria,
una mano que
aprieta y soporta mi espada.
¿Es posible
sentir lo que nunca existió,
lo que nunca
vivimos y menos lo que
supone el
miedo la súplica y el cariño?
Caluroso es el
cielo repleto de firmes estrellas
como puntos de
luz que mi alma llenan.
Los pájaros
retumban cuando
dormía en la
era junto al trigo.
Todo lo que
tengo me produce urticaria,
me da miedo la
vida cómoda y solitaria.
Viviré
mientras pueda componer mis miserias y
dormir de un
tirón con la conciencia tranquila.
29/09/16
Antonio Molina
Medina
Eso es lo importante, vivir y sentir la vida, desde el alma, y dejar los miedos a un lado, porque la vida solo se vive una vez.
ResponderEliminarUn bellísimo poema.
Un beso, Poeta.