El Cobre. Algeciras |
Quizás
sean las palabras más hermosas y tiernas que los vientos me traigan desde los
surcos del arado, con cuyo acero penetran en mi alma… Solo faltan las
semillas, las que nos lanzas al aire para
recoger… recogerlas con ansias y sembrar dentro de los hoyos que mis manos
azuzan con sus dedos, para profundizar en su tierra: suave, aplanada por los tractores de mi recuerdo.
¡Año
pletórico de azucenas! De guía sublime y sin mancha. Como las letras y versos
que salen de tus pestañas y las hace fuente de agua clara.
Hoy
sonríe mi rostro y dejo que mis dedos catapulten y rompan, incluso, las teclas
de mis deseos… Sé que son incapaces de versificar los sueños y sus creencias…
cuyos senderos siguen supliendo a los angostos silencios… Pero, fortuitos y
sedientos, nunca dejaran de sentir, de sentirte, y de acunarte en la cuna de
mis deseos.
El Cobre. Algeciras |
Sueña
y camina.
Y
siente la paz y no la ira.
Yo
siempre seguiré aquí.
Entre
mis letras.
Algunas
verdosas, entre
el
cáñamo y la desdicha.
Antonio
Molina Medina
31.12.18
Sueñas y caminas entre versos y emociones, eres luz y poesía, mi admirado poeta, qué bonito versas y haces prosa, me ha encantado la entrada con esas fotos tan bonitas.
ResponderEliminarUn beso enorme y mucho ánimo en estos días.
Caminamos entre versos acompañados entre prados y viñedos.
ResponderEliminarSolo la luz que mece las espigas, junto al aire que las balancea
son capaces de dejarnos los sentidos despiertos y constantes
para alcanzar la melodía de las palabras
entre los surcos del arado que profundiza en nuestro corazón.
Besos
Gracias por tu compañía.