Playa de Getares- Algeciras- Andalucía |
Nos decía Federico: “Para no perecer de verdad, existe el arte; su
función ayuda a pensar y sentir la existencia de tal forma que nos hace capaces
de afirmar, bendecir y deificar el mundo. La realidad es la muerte del espíritu
y el arte su salvación.”
Y mi conciencia me pregunta:
¿Para qué
luchar? ¡Y por qué!...
Este es el
galimatías que nos ofrecen hoy los seres ‘humanos’, ya sin recato y sin
prudencia ante el aparatoso desacierto a la que nos tienen sometido asesinando
a sus hermanos, mujeres, niños, ancianos y la fauna, sin compasión ni recato.
El Cobre-Chorrosquina- Algeciras
Quizás, la ficción
está invadiendo el planeta que, a pocos les interesa ya que su apuesta es su
propia destrucción. Puede que algunos seamos unos alarmistas, pero cuando vemos
que lo único que hacemos es eliminar a los que no podemos dominar y los
descartamos de la faz de la tierra con la complacencia de gobiernos en su
mayoría desgobiernos que alteran lo cuerdo por la nada…
Ciudad de Orduña-Bizkaia- País Vasco
Ya ves: hoy
tengo poco que aportar ya que la literatura está condicionada a las miserias
humanas quizás hasta la justicia está alterada y ya no interesa a la otra mitad
de la humanidad a la que tratamos de excluir desde la cuna, incluso desde el
vientre de su madre, desde su nacimiento… si con ello sirve a nuestras haciendas.
La tristeza atrabiliaria
circula por mis adentros y la inhabilidad deja a mis sentidos plagados de desasosiegos
y sin salida. Desde los parlamentos, solo aflora, entre mentiras y odio, la ira
y los despropósitos, capaces de convertir y llenar los cementerios y tierras de
baldíos día tras día de hacinados huesos y cráneos blancuzcos producto de su
ira cubiertos de hierros y avisperos que nos manda la indiferencia.
Pasivo será mi
proceder e incautos y sentidos serán los pensamientos que por mis dedos peregrinen
por los atolones de mis sueños incapaces de ceder, aunque la lluvia y las tempestades
y los rayos envuelvan de fuego mi cuerpo ya que poco le queda para su descanso llameante
al que hasta las empobrecidas mentes serán su componente ya que en los
parlamentos abunda la verborrea de mentes que destruyen conciencia.
Antonio Molina
Medina
29.08.24
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