Piden vida, agua, pan, comida y les dan plomo y pólvora.

 

Ciudad de Orduña-Bizkaia-País Basko



Hay quien de marte las crueles obras por pasatiempo eligen, de fraterna sangre, por ocio, tiñese la mano; y a quien consuela ajeno daño, y piensa que viendo a otro infeliz será dichoso y haciendo el mal será mejor su vida; y hay quien virtud, sapiencia y nobles artes persiguiendo, y el que a su propia gente y a la extraña humillando, o de remotas playas turbando la inquietud antigua con el fraude, las armas y el comercio, consuman el destino de su vida.”

Giacomo Leopardi.

 

Delika-Áraba País Basko


Piden vida, agua, pan, comida y

les dan plomo y pólvora.

 

¡Ay qué campo de sangre!

¡Ay qué triste su suerte cuando

se cierran los surcos del arado,

con cuerpos sin vida!

 

Mientras la luna los sigue alumbrando,

¿Dónde está ese dios que tanto nos lo

alentaron entre sufrimientos?

Quizás la leche de cabra dejó

Que nuestro aliento siguiera subsistiendo

A pesar de la angustia que sentíamos por dentro.

 

Delika-Áraba País Basko


¡Ay golondrinas sin ojos que vean

en lo oscuro del bosque!

¡Ay qué hedor de sangre aprisionada

debajo de los surcos de la tierra!

 

Hoy se están clavando los mordiscos

de las avispas en mi piel marchita.

Pero la venganza no será mi guía

Ni mi corazón zozobrara ante tanta desidia

Ya que ese niño ha resucitado en mi alma

 

Delika-Áraba País Basko

Se recuperó entre la espesura de

tanta sangre derramada, cual fruto dulce

de ese amor sin dueño que en

nuestro vientre aguardaba, envuelto

en palabras aladas, ágiles, que truenan,

aferrado a sus barandas. A su alma.

Ciudad de Orduña-Bizkaia-País Basco



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16.09.25

Antonio Molina Medina


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