LA LUNA Y EL SOL

Las Chorrera... Canuto Hondo... Río de la Miel. El Cobre. Algeciras.

¿Por qué la quieres?
Me preguntó la Luna en su noche clara.
Ella me sonríe y la miro a la cara.
¿ Por qué la amas?
Trepidante, la aurora reclama,
sólo me venzo al rocío de su mañana.
¿Al corazón se le piden explicaciones?
¡Qué fuerte es todo lo que le cuenta y sugiere!
¡Qué curioso y paradójico todo lo que acontece!

¿Por qué la amas? Escuchó la Luna al Sol
antes de ocultarse.
¿Acaso tú puedes vivir sin mí,
que velo tu noche floreciente?

¡Porque la quiere...!
¡Díselo a su corazón!
¡Pregúntaselo a su alma!
Ellos saben lo que presienten.
Él, pobre juglar, sólo sabe que la siente
como un aguijón incrustado en su vientre.

Porque su vida estaba de luces y sombras
de sombras y luces,
sin luna ni cielo,
sin sol que alumbrase.

Curso del río de la Miel... El Cobre... Algeciras.
Una cierta lumbre calentó su alma
despejó las dudas,
sofocó sus ansias
y se aposentó, cercana, en silencio
debajo su cama.
En noches en vela
salía de las sombras,
se acurrucaba en su almohada
y se hacía fuerte.
Le envolvía de calma,
de ilusión y vida,
por la que vive,
por la que se muere,
día a día, desde sus mañanas
salpicando su agua la
de la Chorrera por sus mañanas.
Antonio Molina Medina

1 comentario:

  1. No hay vida sin luna, sin sol, no hay vida sin emoción, porque la vida es ilusión, es latido, es llanto... es amor...

    Qué preciosos versos, mi admirado poeta, es un gusto leerte y beber de tus letras.

    Un beso enorme.

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