La Madre Tierra Mujer y Hembra |
Si esto que me pasa es
la locura,
mejor ser loco cuerdo
que pasar por la
tortura
de no poder decir aquello que siento.
Soñar con ella, aun despierto,
y reír; llorar de querer tanto
sin pensar en el
mañana
que me arrebatará de su lado
cualquier día, a cualquier hora...
Pero pensando en ella a todas horas,
y sentirla cercana y
soñadora.
Antonio Molina Medina
14.03.21
Me encanta Antonio!!!
ResponderEliminarEsa capacidad de reconocer a la madre tierra como una amante, como un regalo que se nos ofrenda a cada instante y hay que disfrutar.
Misterios que develar .
Horas por caminar
antes de que tengamos que partir
y dar gracias en todo momento por ese despliegue maravilloso
que nos regala de vida
desde que despertamos hasta que volvemos a descansar.. Un poema de amor naturaleza/mujer , simplemente hermoso!Que tengas un domingo plenamente disfrutable en tu lugar de alegria y paz. Besos
Quizás sean los años vividos donde nuestras vidas eran mas humildes y seguras a pesar del martirio de una posguerra, creo que en esa humildad había más amor entre nuestra gente y mas ternura entre los hermanos. El pueblo sencillo y triste, pero el amor brillaba en muchos hogares en los que compartí mi pubertad y juventud, donde se colaboraba en la siega y se compartía el pan y el trabajo entre los vecinos.
ResponderEliminarHoy mi recuerdo es para esa tierra que siguen dándonos con humildad y sabiduría lo necesario para el cuerpo pero la maldad del vecero de oro se apropió de esos intrusos amanerados que nos robaron hasta la pobreza y la tierra compartida, pero nunca la ilusión.
De ahí… esa mujer pisoteando la tierra aterronada con su azada en sus manos desterronaban los campos sin horario ni consuelo… Ya que cuando nos miraban de niños algunas lloraban por el poco alimento que nos podían dar mientras otros lo tiraban.
Algunos salimos de esas andaduras pero otro siguen en la miseria a pesar de que la tierra que nos pario nos puso como condición “ganaras el pan con el sudor de tu frente” y eso hacían pero hoy ya no hay tierra que labrar solo cemento, ladrillos y desprecio al ser humano que ni limosnas les damos.
Un besote y gracias por tus comentarios.