Jokin y Antonio- |
Cuando te encuentras sólo e
intranquilo
tus recuerdos afloran y te
revuelves en el pasado;
recoges ‘toas’ tus
pertrechadas vivencias
y caminas bajo la lluvia
con el frío,
recorres toda la ría de
agua embarullada
y piensas que
encontrarás la fuente de las delicias.
Los sentidos se aglomeran,
se ensartan en tus pestañas.
Ciego y certero te
encuentras con la puerta burladero.
Los sentidos te reclaman.
Te produce un aguacero
Que no puedes digerir y,
una vez más, el silencio.
Con la cabeza entre las
manos y el corazón en un puño
regresas cabizbajo por no
encontrar el refugio
donde tu alma gozaba y,
entonces, tu corazón diluvia.
Una vez yo tuve un sueño, y
soñé que idealiza,
muy cerquita de la ría, mi
corazón galopaba.
Triste y con pena en la
noche, mis pasos me regresaban
entre la lluvia, y en el
frío, mi corazón aún luchaba.
Antonio Molina Medina
30.10.22
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