Sinovas Aranda de Duero Castilla y León |
Una mañana
apacible y llena de resortes me acompaña, amiga mía. Siento como vuelven las
golondrinas a colarse por el portón de mi cortijo, cuando mi madre les habría sus
puertas, en busca de su nido. Yo, sonrío
y sonrío ¡gozo entre bambalinas! repleto de sustancias de afrecho y harina. Mi
mente se deja llevar y, de mis dedos, se desprenden sabores y olores a tierra
roja; terrones donde el surco se abre por la punzada del arado en la tierra mientras,
las golondrinas siguen entrando y saliendo, llevando en sus picos alimento para
sus crías.
Romiya año 1966- Pedaniía de Chauchina. Granada
Respiro
plácidamente y sonrío de nuevo a la vida, compartiendo las flores del campo y
la sonrisa de mujer divina.
Restos del castillo de Orduña-Bizkaia.
Muchas, muchas,
muchas gracias por tu compañía, mi querida amiga. Solo los sabios se acercan al
precipicio para expulsar sus miserias, las que acumulamos día tras día, y tras su perfil, se pueden ver las cabras saltando de tajo en
tajo, regodeándose de la naturaleza viva ¡muy viva! que nos sonríe y nos indica
lo sencillo que es encontrarla, al margen de las guaridas de ratas en la
ciudades que nos aportan poca vida.
Río de la Miel. Parque de los Alcornocales- El Cobre-Algeciras. |
Antonio
Molina Medina
19.11.20
Respiro tus emociones, tus vivencias, tus sentimientos, y vuelo con la imaginación.
ResponderEliminarUn placer leerte, poeta.
Besos.
EliminarCompartir a la vez tus sentimientos los que vuelan por los renglones de tus versos… los que hoy respiran esperanza y de serpentinas alocadas, las que, vuelan cercando nuestras palabras… y no hay arrogancia en su aptitud. Solo son vuelos de pájaros en libertad, los que, se apropiaron de su cuerpo y se dejo introducir a punta del arado entre los surcos de tus versos…, los que apaciguan cuerpos doloridos por la desidia e incongruencia de seres que no amaban, ni aman a los seres humanos.
Gracias y besos.