Ha creado el tiempo
dentro de su propio tiempo
escribiendo lo que del
corazón le brota sin ordenes.
Es producto de su arrojo
involucrándose,
diluyéndose,
en su verdad
incuestionable,
como lo hace el viento,
la lluvia
y el silencio,
con un ciempiés
como herramienta.
Antonio Molina Medina
Mi querido amigo Antonio.
ResponderEliminarPoco a poco vuelvo a retomar mi retmo, el tiempo...eso que llega y se pasa, a veces sin darnos cuenta, como soplo de suave brisa.
Un gran abrazo en este domingo.
Ambar
Escribir dejándonos llevar por la inspiración del corazón, es lo más grande, sin pensar, nada más sintiendo los latidos.
ResponderEliminarVoy a mirar que creo tengo más entradas atrasadas por comentar, esta semana no comenté en los blogs, pero ya me pongo al día.
Un beso.